NOLITO ES LA GRUA DEL CELTA
Otro gol suyo, a seis minutos del final le dio un valioso empate al Celta en Anoeta. La Real, que se adelantó con un gol de Agirretxe, no aleja el peligro.
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El jugador de la Real Sociedad Íñigo Martínez lucha un balón con Fontás, del Celta de Vigo. | Javier Etxezarreta
Se mantienen las maldiciones en Anoeta. El Celta todavía no ha conseguido ganar allí en lo que va de siglo y la Real Sociedad es incapaz de vencer sin su estrella Vela. Y eso que tardó poco en disfrazarse de mexicano. El artillero realista aprovechó una brillante asistencia con la cabeza de Xabi Prieto para batir a Sergio a los nueve minutos. Antes había avisado Nolito,
pero Zaldua evitó su tanto in extremis. El lateral derecho realizó un
partido soberbio y su duelo con el sanluqueño fue legendario. Tras el
tanto donostiarra, Mina estuvo a punto de igualar con
un testarazo. También rozó el segundo tanto la Real por medio de
Agirretxe. El punta remató un gran centro de Chory Castro, pero Sergio
pudo reaccionar a tiempo, pues el disparo no fue esquinado.
El primer cuarto de hora fue un continuo ida y vuelta de ambos equipos. Salieron con energía y pronto necesitaron tomarse un respiro. Por eso apenas hubo más ocasiones en la primera parte. En el segundo acto, una volea de Santi Mina abrió las hostilidades. La Real Sociedad empezó a retroceder y el Celta cada vez se volcaba más sobre el área rival. Larrivey, Nolito y Mina gozaron de ocasiones, pero no tuvieron puntería. Sin embargo, cuando el partido agonizaba y Berizzo introdujo toda su artillería, Nolito sacó su arte a relucir para empatar el encuentro. El sanluqueño batió a Rulli con un imposible tiro cruzado a la media vuelta. Cosas de genios.
El primer cuarto de hora fue un continuo ida y vuelta de ambos equipos. Salieron con energía y pronto necesitaron tomarse un respiro. Por eso apenas hubo más ocasiones en la primera parte. En el segundo acto, una volea de Santi Mina abrió las hostilidades. La Real Sociedad empezó a retroceder y el Celta cada vez se volcaba más sobre el área rival. Larrivey, Nolito y Mina gozaron de ocasiones, pero no tuvieron puntería. Sin embargo, cuando el partido agonizaba y Berizzo introdujo toda su artillería, Nolito sacó su arte a relucir para empatar el encuentro. El sanluqueño batió a Rulli con un imposible tiro cruzado a la media vuelta. Cosas de genios.
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