LA INFOCA LLAMA A PRIMERA FILA CONTRA EL FUEGO A PERSONAL CON MAS DE 60 AÑOS IDEAL.ES
-
Doce operarios con esta edad han superado las pruebas físicas y están ya a disposición de las brigadas forestales
La Agencia de Medioambiente y Agua de Andalucía (Amaya), de la que
depende el personal del Plan Infoca –el que lucha cada verano contra los
incendios forestales y tiene también a su cargo la limpieza de los
bosques durante todo el año–, ha obligado a personas mayores de 60 años a
pasar las correspondientes pruebas físicas para integrarse en las
patrullas de primera línea contra el fuego. Esta situación deriva del
plan de ajuste pactado en febrero de 2014.
Se trata de un reclutamiento forzoso de trabajadores de la propia agencia, que dejan sus ocupaciones habituales y pasan a desempeñar funciones que comportan un elevado riesgo para su integridad física y que a su vez requieren de una buena forma física. Así lo han denunciado a este periódico responsables de UGT-Granada en la Amaya, quienes alertan también de que el personal afectado no tiene otra opción a la decisión tomada por la agencia que no sea un despido con 20 días de indemnización por año trabajado.
Como explican los representantes de UGT en la Amaya, la edad media del dispositivo Infoca es muy elevada, pues más del 20% de los trabajadores están por encima de los 55 años, el personal está envejecido y en lugar de hacer una oferta pública de empleo y rejuvenecer la plantilla, dando la posibilidad a los mayores de acceder a la jubilación de forma anticipada y darles una salida digna tras años de servicio, «se les obliga a continuar en sus puestos, haciendo pruebas físicas y forzando a trabajadores de otras áreas de la agencia, como por ejemplo de expedientes de biodiversidad, especies protegidas, uso público etc., a acudir a los incendios para poder completar unidades que de otra forma irían con incluso sólo dos o tres componentes de los siete que deberían tener», explica Juan Sola, secretario de la sección sindical de UGT en la mencionada agencia.
Adicionalmente, las movilidades internas del personal del Infoca para cubrir puestos ha obligado a desplazar a trabajadores de la zona de Baza a la Alpujarra. Son en concreto cinco personas. «El convenio por el que se rige el personal del Infoca prohíbe que estas personas mayores estén en primera línea de lucha contra el fuego porque son personas que por mucho que superen unas pruebas no están en condiciones físicas, tienen riesgos cardiovasculares muy importantes», señala en este punto Ángel Tomás Morales, delegado ugetista en la agencia Amaya en la provincia de Granada.
IDEAL intentó contrastar la información con la delegada en funciones de Medio Ambiente, Inmaculada Oria, sin respuesta por su parte.
Se trata de un reclutamiento forzoso de trabajadores de la propia agencia, que dejan sus ocupaciones habituales y pasan a desempeñar funciones que comportan un elevado riesgo para su integridad física y que a su vez requieren de una buena forma física. Así lo han denunciado a este periódico responsables de UGT-Granada en la Amaya, quienes alertan también de que el personal afectado no tiene otra opción a la decisión tomada por la agencia que no sea un despido con 20 días de indemnización por año trabajado.
Como explican los representantes de UGT en la Amaya, la edad media del dispositivo Infoca es muy elevada, pues más del 20% de los trabajadores están por encima de los 55 años, el personal está envejecido y en lugar de hacer una oferta pública de empleo y rejuvenecer la plantilla, dando la posibilidad a los mayores de acceder a la jubilación de forma anticipada y darles una salida digna tras años de servicio, «se les obliga a continuar en sus puestos, haciendo pruebas físicas y forzando a trabajadores de otras áreas de la agencia, como por ejemplo de expedientes de biodiversidad, especies protegidas, uso público etc., a acudir a los incendios para poder completar unidades que de otra forma irían con incluso sólo dos o tres componentes de los siete que deberían tener», explica Juan Sola, secretario de la sección sindical de UGT en la mencionada agencia.
En Granada
Por lo que a la provincia de Granada respecta, los datos facilitados
por el sindicato ugetista cifran en 42 las personas mayores de 60 años
que trabajan en el Plan Infoca del presente año. Doce de estas personas
han superado ya las pruebas físicas a las que han sido requeridos. Junto
a estos anteriores, otro pequeño colectivo de 21 personas que proceden
de áreas distintas de la agencia Amaya y que no tienen experiencia
alguna en extinción de incendios, también han sido llamados para superar
las citadas pruebas físicas e incorporarse a las brigadas del Infoca en
Granada o en cualquier otra provincia andaluza. Adicionalmente, las movilidades internas del personal del Infoca para cubrir puestos ha obligado a desplazar a trabajadores de la zona de Baza a la Alpujarra. Son en concreto cinco personas. «El convenio por el que se rige el personal del Infoca prohíbe que estas personas mayores estén en primera línea de lucha contra el fuego porque son personas que por mucho que superen unas pruebas no están en condiciones físicas, tienen riesgos cardiovasculares muy importantes», señala en este punto Ángel Tomás Morales, delegado ugetista en la agencia Amaya en la provincia de Granada.
IDEAL intentó contrastar la información con la delegada en funciones de Medio Ambiente, Inmaculada Oria, sin respuesta por su parte.
Curso insuficiente
UGT también pone el punto de mira de esta situación en los cursos de
capacitación que se imparten a los operarios obligados a desplazarse al
Infoca. Un curso de tres mañanas, con duración de 18 horas en total. «A
partir de ahora debemos suponer que estas personas están aptas para la
extinción de incendios», afirma Morales. Este delegado sindical añade
que en algún caso se ha metido en la misma unidad de siete componentes
hasta cuatro personas procedentes de este grupo de operarios de la
agencia, que son obligadas a permanecer en el dispositivo contra su
voluntad, en peores condiciones laborales que el resto de sus compañeros
ya que ni siquiera se les abona correctamente una categoría superior
que es en la que están integrados. «Lo que está en juego no es un
problema laboral, sino la seguridad de estas personas y desde la agencia
se maquilla la realidad», añade.
Comentarios
Publicar un comentario