"GRANADA DEBERIA PREOCUPADA NO SE PRODUZCAN TERREMOTOS".
GRANADA HOY
Los geólogos aseguran que el riesgo de seísmos "no ha aumentado" y que, mientras haya pequeños movimientos, se libera energía
La provincia sintió ayer de nuevo, aunque con menos intensidad,
el terremoto que se produjo en la misma zona del Mar de Alborán del
seísmo del pasado lunes. En este caso, se siguen tratando de réplicas de
ese registro, de menor magnitud. En concreto, el de ayer se registró a
las 07:32 hora local a 15,3 kilómetros de profundidad en la bahía de
Alhucemas y tenía una magnitud de 4,8. Se dejó notar con intensidad III y
IV en Melilla; II-III en Málaga, Motril, Benalmádena y Marbella y II en
Estepona, Fuengirola, Vélez Málaga, Nerja, Almuñécar, Granada, Adra y
Almería, según los datos del Instituto Andaluz de Geofísica.
Según el Colegio de Geólogos de Andalucía, el riesgo de terremotos tras la serie que se está registrando en la zona de Alhucemas "no ha aumentado" sino que es el mismo debido al marco geológico en el que se encuentra. Y es que "la provincia presenta un riesgo elevado debido a la composición del terreno y a las distintas fallas que en ella se encuentra, como la de Nigüelas", informaron ayer desde el Colegio a este periódico.
En estos momentos, los registros de actividad sísmica en Grana "son los normales", según los geólogos, que explican que a diario se producen pequeños sismos "que facilitan que las placas liberen energía". El Colegio aclara a la población que "la liberación constante de la energía del subuselo es positivo, ya que una población con riesgo sísmico, como la granadina, debe de estar preocupada cuando no se producen registros sísmicos". "Esto significaría", añadieron, "que no se está liberando la energía contenida y si se acumula llegará el día que se libere a modo de fuerte terremoto". Así que mientras se produzcan terremotos se libera energía.
Los geólogos insisten en que la zona de la Vega de Granada presenta "un alto riesgo dado la composición del terreno porque cuenta con meteriales detríticos y agua de distintos acuíferos, lo que propicia que las ondas sísmicas se propaguen más fácilmente y produzcan mayores efectos.
Los efectos de los terremotos dependen de la profundidad, la situación e intensidad del mismo y la capacidad de los materiales geológicos de propagar las ondas. Por esto el Colegio de Geólogos de Andalucía insiste en solicitar "la actualización de la normativa sismorresistente, de 2002, y una evaluación de riesgo sísmico de detalle en la comunidad andaluza". Los edificios más vulnerables son los antiguos, sin estructuras sólidas y los que no cumplen con ningún tipo de normativa, y en Granada los situados en los barrios históricos, son de alto riesgo.
Según el Colegio de Geólogos de Andalucía, el riesgo de terremotos tras la serie que se está registrando en la zona de Alhucemas "no ha aumentado" sino que es el mismo debido al marco geológico en el que se encuentra. Y es que "la provincia presenta un riesgo elevado debido a la composición del terreno y a las distintas fallas que en ella se encuentra, como la de Nigüelas", informaron ayer desde el Colegio a este periódico.
En estos momentos, los registros de actividad sísmica en Grana "son los normales", según los geólogos, que explican que a diario se producen pequeños sismos "que facilitan que las placas liberen energía". El Colegio aclara a la población que "la liberación constante de la energía del subuselo es positivo, ya que una población con riesgo sísmico, como la granadina, debe de estar preocupada cuando no se producen registros sísmicos". "Esto significaría", añadieron, "que no se está liberando la energía contenida y si se acumula llegará el día que se libere a modo de fuerte terremoto". Así que mientras se produzcan terremotos se libera energía.
Los geólogos insisten en que la zona de la Vega de Granada presenta "un alto riesgo dado la composición del terreno porque cuenta con meteriales detríticos y agua de distintos acuíferos, lo que propicia que las ondas sísmicas se propaguen más fácilmente y produzcan mayores efectos.
Los efectos de los terremotos dependen de la profundidad, la situación e intensidad del mismo y la capacidad de los materiales geológicos de propagar las ondas. Por esto el Colegio de Geólogos de Andalucía insiste en solicitar "la actualización de la normativa sismorresistente, de 2002, y una evaluación de riesgo sísmico de detalle en la comunidad andaluza". Los edificios más vulnerables son los antiguos, sin estructuras sólidas y los que no cumplen con ningún tipo de normativa, y en Granada los situados en los barrios históricos, son de alto riesgo.
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