NO LLOVERA EN SEMANA SANTA
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Desde 1999 no hay una Semana Santa con todas las cofradías en la calle
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) espera que la
inestabilidad climatológica de estos días se mantenga hasta mediados de
la próxima semana y que el jueves comience a mejorar. A partir de ahí
tendríamos toda una Semana Santa con buen tiempo y sin lluvia, lo que
posibilitaría que todas las cofradías pudieran salir a la calle, algo
que en la capital granadina no ocurre desde el año 1999.
La tendencia climatológica apunta a que la Semana Santa, que comenzará el 29 de marzo y se extenderá hasta el 5 de abril, podría ser más cálida y menos lluviosa de lo normal, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) que espera que la inestabilidad se mantenga hasta mediados de la próxima semana y que el jueves comience a mejorar. La portavoz de la Aemet, Ana Casals, ha explicado que el jueves de la próxima semana volverá poco a poco la estabilidad y que el viernes mejorará la situación aunque seguirá lloviendo algo por el norte, y ya el Domingo de Ramos será “un alivio” porque el tiempo “mejorará ostensiblemente”.
Más allá de ese horizonte temporal, ha comentado que “aún es pronto” para poder precisar más pero ha subrayado que “la tendencia apunta” a que habrá menos precipitación de lo normal en toda la Península de la que es habitual para ese periodo y que se prevé que haga más calor en casi toda la península.
La próxima semana, el lunes seguirá con precipitaciones localmente fuertes o persistentes y acompañadas de algunas tormentas en el centro, sur y este de la Península, y de carácter más débil y menos probables en el noroeste peninsular y Baleares; en Canarias, no se descartan chubascos localmente fuertes. En cuanto al martes y miércoles, ha indicado que seguirán las precipitaciones en los extremos norte y sureste de la Península, sin descartar que sean todavía localmente fuertes. Además, ha dicho que también podría haber algunas precipitaciones más débiles en el resto del país y que serán menos probables en el oeste peninsular y en el sur de Canarias. El martes comenzará lloviendo por todas las zonas y después se restringirá al norte y tercio este de la Península y, a partir del miércoles, “habrá una tendencia progresiva a disminuir las precipitaciones en la mayor parte del país”, aunque aún serán “probables” en el extremo norte y sureste. Mientras, en el centro y sur de la Península y en el sur de Canarias, lo más probable es que remitan y, al mismo tiempo, tenderán a subir las temperaturas en la mayoría de las zonas. Según la portavoz, el jueves seguirán disminuyendo las precipitaciones en la mayor parte del país aunque aún permanecerán en el extremo norte, y en el resto remitirán y seguirán ascendiendo los termómetros “en la mayor parte de las zonas”.
Si consultamos las páganas web meteorológicas más habituales, este año todas coinciden en apuntar una Semana Santa libre de precipitaciones y en la que, al fin, los cofrades no tendrán que estar mirando hacia el cielo. En 1999 el tiempo acompañó a todas las cofradías, que realizaron con normalidad su estación de penitencia, pero desde entonces todos los años la lluvia las ha afectado en mayor o menor medida. Solo en el año 2001 no llovió, pero entonces la cofradía del Nazareno estaba suspendida por el arzobispo y no pudo salir a la calle. De este modo, la próxima Semana Santa se cerraría un largo ciclo de dieciséis años sin una nómina completa y tranquila de cofradías en la calle
La tendencia climatológica apunta a que la Semana Santa, que comenzará el 29 de marzo y se extenderá hasta el 5 de abril, podría ser más cálida y menos lluviosa de lo normal, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) que espera que la inestabilidad se mantenga hasta mediados de la próxima semana y que el jueves comience a mejorar. La portavoz de la Aemet, Ana Casals, ha explicado que el jueves de la próxima semana volverá poco a poco la estabilidad y que el viernes mejorará la situación aunque seguirá lloviendo algo por el norte, y ya el Domingo de Ramos será “un alivio” porque el tiempo “mejorará ostensiblemente”.
Más allá de ese horizonte temporal, ha comentado que “aún es pronto” para poder precisar más pero ha subrayado que “la tendencia apunta” a que habrá menos precipitación de lo normal en toda la Península de la que es habitual para ese periodo y que se prevé que haga más calor en casi toda la península.
La próxima semana, el lunes seguirá con precipitaciones localmente fuertes o persistentes y acompañadas de algunas tormentas en el centro, sur y este de la Península, y de carácter más débil y menos probables en el noroeste peninsular y Baleares; en Canarias, no se descartan chubascos localmente fuertes. En cuanto al martes y miércoles, ha indicado que seguirán las precipitaciones en los extremos norte y sureste de la Península, sin descartar que sean todavía localmente fuertes. Además, ha dicho que también podría haber algunas precipitaciones más débiles en el resto del país y que serán menos probables en el oeste peninsular y en el sur de Canarias. El martes comenzará lloviendo por todas las zonas y después se restringirá al norte y tercio este de la Península y, a partir del miércoles, “habrá una tendencia progresiva a disminuir las precipitaciones en la mayor parte del país”, aunque aún serán “probables” en el extremo norte y sureste. Mientras, en el centro y sur de la Península y en el sur de Canarias, lo más probable es que remitan y, al mismo tiempo, tenderán a subir las temperaturas en la mayoría de las zonas. Según la portavoz, el jueves seguirán disminuyendo las precipitaciones en la mayor parte del país aunque aún permanecerán en el extremo norte, y en el resto remitirán y seguirán ascendiendo los termómetros “en la mayor parte de las zonas”.
Si consultamos las páganas web meteorológicas más habituales, este año todas coinciden en apuntar una Semana Santa libre de precipitaciones y en la que, al fin, los cofrades no tendrán que estar mirando hacia el cielo. En 1999 el tiempo acompañó a todas las cofradías, que realizaron con normalidad su estación de penitencia, pero desde entonces todos los años la lluvia las ha afectado en mayor o menor medida. Solo en el año 2001 no llovió, pero entonces la cofradía del Nazareno estaba suspendida por el arzobispo y no pudo salir a la calle. De este modo, la próxima Semana Santa se cerraría un largo ciclo de dieciséis años sin una nómina completa y tranquila de cofradías en la calle
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