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Ayudó a encontrar a un piragüista perdido en el pantano, por lo que no pudo recargar las baterías ni realizar el último viaje
Una familia había alquilado varios kayak para hacer una travesía por el pantano del Tranco. Un varón de algo más de cincuenta años se desorientó y no llegó con el grupo. Su esposa dio la voz de alarma, preocupada por lo que pudiera haberle ocurrido, y el centro de ocio decidió colaborar en la búsqueda por las orillas del embalse con una lancha y el barco. Al final encontraron al hombre y todo quedó en un susto, pero el barco solar no pudo recargar las baterías y además en las labores de rastreo gastó más energía al navegar por encima de los siete nudos con que suele hacerlo en los viajes de ocio por el pantano.
El director del centro añadió que estos viajes se reanudaron por la tarde pero que al final del penúltimo trayecto el barco empezó a dar señales de falta de energía, siendo ayudado por la lancha, aprovechando de paso para comprobar que esta puede remolcado en un futuro si vuelve a quedarse sin energía o si sufre alguna avería. El barco solar no pudo hacer el último viaje por esta razón y, según indicaron los empresarios, el personal del centro de ocio explicó lo ocurrido a quienes esperaban para embarcar.
El centro de ocio está integrado por cinco empresas y trabajadores autónomos de Cortijos Nuevos, que gestionan este nuevo recurso construido por la Diputación Provincial y la Junta de Andalucía en el término municipal de Hornos de Segura, en pleno Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas.
El complejo construido junto al pantano cuenta con un edificio de usos múltiples de tres plantas y dotado de diferentes equipamientos y espacios dedicados a cafetería, tienda, restaurante, salón de actos, rocódromo, tirolina, torre mirador o paseo de las rapaces con ilustraciones en paneles, entre otros.
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