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Los estudiantes usan pistas municipales fuera de sus instalaciones y llevan cuatro años usando unas aulas prefabricadas con grandes deficiencias
Las graves deficiencias del colegio San Isidro, en El Chaparral, traen de cabeza a los padres de los alumnos. Tal y como publica IDEAL en su edición impresa y en 'Kiosko y más', el centro presenta importantes taras que dificultan la labor diaria de los profesores y preocupa a los progenitores de los más de trescientos estudiantes.
Denuncian que el colegio lleva cuatro años con aulas prefabricadas y que los niños usan unas pistas deportivas que se encuentran fuera de las instalaciones educativas. "Tienen que salir a la vía pública para poder dar clase de deporte", asegura la madre de uno de los alumnos. No es el único problema. Una calle por donde transitan coches divide en dos los edificios del centro, por lo que profesores y estudiantes -desde Preescolar a Primaria- deben atravesar la carretera para ir de un lado a otro.
Una comisión de padres se reunió ayer con el Ayuntamiento de Albolote para buscar una solución. El alcalde de la localidad, Pablo García, aseguró que no puede ceder ningún terreno para la construcción de un nuevo centro y propuso el derribo del actual para levantar otro en el mismo lugar, algo que ha sido rechazado por la falta de espacio. Ante la grave situación actual, los padres han anunciado que se manifestarán el próximo 28 de febrero para reclamar un colegio digno para sus hijos.
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